El Gobierno de la República Dominicana ha actualizado la escala salarial de la Policía Nacional, como parte de la reforma policial y con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los agentes que trabajan en el cuerpo del orden. Esta actualización se llevó a cabo tras el anuncio del presidente Luis Abinader, en febrero de este año, sobre un aumento salarial para los policías.
Los sueldos de los policías dominicanos varían según el rango en el que se encuentren. Por ejemplo, el salario de un raso pasó de RD$20,463.25 a RD$24,555.90, mientras que el de un cabo aumentó de RD$22,613.31 a RD$26,233.93. Los sargentos mayores pasaron de recibir RD$26,428.42 a RD$30,394.94, mientras que los tenientes pasaron de RD$26,000 a RD$31,510.28 (para el segundo teniente) y RD$32,541.78 (para el primer teniente).
Los capitanes aumentaron su salario de RD$28,941.76 a RD$34,575.75; los mayores de RD$30,906 a RD$35,615.53; los tenientes coroneles de RD$34,983 a RD$39,234.81 y los coroneles de RD$39,715 a RD$42,907.52. Los generales de Brigada ahora reciben RD$50,275.72, en comparación con los RD$47,881 anteriores, mientras que el mayor general recibe RD$60,049.00.
El Gobierno también ha implementado otras medidas para mejorar las condiciones de trabajo de los policías. Además de los aumentos salariales, los agentes de policía reciben transporte gratuito en el Metro de Santo Domingo, el Teleférico y las unidades de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (Omsa). Además, los policías y sus hijos pueden acceder a becas universitarias, seguro médico complementario y descuentos en supermercados. También se les proporciona suministro de alimentos cocidos de los Comedores Económicos.
El objetivo del Gobierno es que para octubre de este año, el salario mínimo de un agente de policía alcance los 500 dólares. Esta medida representa un gran avance para el bienestar de los policías, quienes arriesgan sus vidas diariamente para proteger a la ciudadanía. Es importante que el Gobierno siga implementando políticas que mejoren la calidad de vida de los agentes, quienes merecen un trato justo y condiciones laborales dignas.