El cantante estadounidense R. Kelly ha sido condenado a 30 años de cárcel por utilizar su condición de famoso para abusar sexualmente de niños y mujeres.
El artista de R&B, de 55 años, fue condenado el pasado mes de septiembre en Nueva York por delitos de asociación ilícita y tráfico sexual.
Se enfrentó a años de acusaciones y el juez dijo el miércoles que tenía una "indiferencia hacia el sufrimiento humano".
Los abogados del cantante, cuyo nombre real es Robert Sylvester Kelly, dicen que apelará.
Antes de su sentencia, un puñado de mujeres subió al estrado para enfrentarse a Kelly.
Una mujer, identificada sólo como Angela, calificó al cantante de flautista de Hamelín que "crecía en maldad" con cada nueva víctima, mientras que otras, que no fueron nombradas, declararon que les había destrozado el espíritu.
"Deseé literalmente morirme por cómo me hizo sentir", dijo una de ellas.
Vestido con caquis de la cárcel y gafas oscuras, Kelly no quiso hacer ninguna declaración y no reaccionó cuando se dictó el veredicto.
La jueza de distrito Ann Donnelly dijo que la celebridad había utilizado el sexo como un arma, obligando a sus víctimas a hacer cosas indecibles y cargando a algunas con enfermedades de transmisión sexual.
"Les enseñó que el amor es esclavitud y violencia", dijo.
El tribunal escuchó cómo Kelly -conocido por canciones de éxito como I Believe I Can Fly e Ignition- utilizó su influencia para atraer a mujeres y niños hacia el abuso sexual durante dos décadas.
Los miembros del jurado en su juicio de seis semanas en Brooklyn escucharon cómo traficaba con mujeres entre diferentes estados de EE.UU., ayudado por gerentes, guardias de seguridad y otros miembros de su entorno.
El tribunal también escuchó cómo Kelly había obtenido ilegalmente los papeles para casarse con la cantante Aaliyah cuando ésta tenía 15 años en 1994, siete años antes de que la cantante muriera en un accidente de avión.
El certificado, que se filtró en su momento, indicaba que la edad de Aaliyah era de 18 años. El matrimonio se anuló meses después.
Jovante Cunningham, antigua corista de Kelly, dijo que nunca creyó que llegaría este día.
"No hubo un día en mi vida, hasta este momento, en que creyera que el sistema judicial se ocuparía de las chicas negras y morenas", dijo a los periodistas.
"Estoy aquí muy orgullosa de mi sistema judicial, muy orgullosa de mis compañeras supervivientes y muy satisfecha con el resultado".
