5 consejos prácticos para ahorrar energía durante toda la temporada
La sustitución de ventanas y puertas es el cuarto proyecto de remodelación del hogar más común y los expertos dicen que puede reducir drásticamente las facturas de servicios públicos. Sin embargo, cuando se trata de elegir opciones más eficientes desde el punto de vista energético, los consumidores pueden sentirse abrumados por el torbellino de tecnología, terminología y opciones que hay en el mercado actual.
Los propietarios de viviendas deben contar con información precisa para poder elegir las mejores opciones disponibles. Esto es especialmente cierto cuando los costes de la energía siguen aumentando. El programa Energy Star de la Agencia de Protección Medioambiental calcula que el ahorro que supone la sustitución de ventanas de un solo cristal por otras calificadas como Energy Star oscila entre 125 y 340 dólares al año para una vivienda típica.
Dado que esta es la época del año en la que muchos propietarios se embarcan en proyectos de remodelación, he aquí cinco consejos básicos para seleccionar las ventanas y puertas más eficientes desde el punto de vista energético para su hogar.
* Utilice vidrio de baja emisividad. Seleccione ventanas con vidrio de baja emisividad, que controla la cantidad de calor que se transfiere a través de la ventana y evita la pérdida de calor en invierno. Jeld-Wen, fabricante de ventanas y puertas, ofrece ahora vidrio de baja emisividad como estándar para sus ventanas de madera y revestimiento de madera y como opción de mejora para sus ventanas de vinilo.
* Actualice la tecnología. Sustituya las antiguas ventanas de un solo cristal por unidades de doble cristal, que aíslan la casa tanto del frío como del calor. El uso de vidrios de baja emisividad y de unidades de vidrio aislante reducirá los costes energéticos del hogar.
* Tenga en cuenta cómo se fabrican. Elija puertas con núcleos, alféizares y marcos energéticamente eficientes que ofrezcan una barrera al intercambio de energía. Los vidrios de doble hoja y baja emisividad ayudan a garantizar la estanqueidad y la eficiencia energética. Por ejemplo, los estudios demuestran que, con el paso del tiempo, las puertas de acero fabricadas con poliestireno mantienen mejor la calificación energética que las puertas fabricadas con poliuretano.
* Comprender las normas. Las calificaciones de eficiencia se basan en el factor U, que es la cantidad de flujo de calor a través de un producto. Cuanto menor sea el factor U, más eficiente será el producto. La eficiencia también se mide por el coeficiente de ganancia de calor solar (SHGC), que indica la capacidad de bloquear el calor generado por la luz solar. Cuanto menor sea el SHGC, mejor. Por último, los expertos evalúan la Transmisión de Luz Visible, que es el porcentaje de luz solar que es capaz de penetrar en una ventana o puerta. Los porcentajes más altos significan que entrará más luz a través del cristal.
* Céntrese en la eficiencia, no en las campanas y silbatos. Los fabricantes consiguen la eficiencia de diferentes maneras. Independientemente de la tecnología empleada, una de las formas más fáciles de identificar los productos más eficientes desde el punto de vista energético es simplemente buscar la etiqueta Energy Star.
