Los ataques de pánico son uno de los trastornos más Comunes en Estos Días
Los ataques de pánico son uno de los trastornos más Comunes en el mundo Que vivimos La Gente vive Presa del Miedo.
Los ataques de pánico son uno de los trastornos más frecuentes en el mundo. Se calcula que 4 ó 5 de cada cien personas se ven gravemente afectadas por él, de una forma u otra. A causa de los ataques de pánico, un estado de ánimo casual puede convertirse en un estado de ánimo de vértigo, de nerviosismo, de no poder sentarse en la silla, como el que siente un marido cuando espera ansiosamente que su mujer dé a luz a su hijo.
Un poco de ansiedad no es algo malo. Te ayuda a protegerte del daño o del peligro potencial, real o imaginario, como otras emociones. Me explico.
Los seres humanos son las criaturas más fascinantes e intrigantes de la Tierra.
La razón más pronunciada por la que dominamos el reino animal es el funcionamiento del cerebro humano. Uno de los rasgos más distintivos del ser humano es la capacidad de tener sentimientos. Aunque no se concluye necesariamente que los animales no tengan sentimientos, como demuestran las investigaciones sobre el modo en que reaccionan ante determinadas situaciones, los sentimientos humanos tienen una profundidad y un significado que van mucho más allá de lo que pueden alcanzar los animales.
En el caso de los sentimientos que nos proporcionan el bien, exponemos formas de mejorarlo aún más. En el caso de los sentimientos que nos producen daño y dolor, también intentamos minimizarlos o alejarnos de ellos todo lo posible. La ansiedad no es una excepción. No es necesario erradicar totalmente los sentimientos dañinos porque al menos algunos de ellos no son 100% perjudiciales. En pequeños aspectos también nos hacen goo. La idea es controlar y no ser controlado. Tomemos como ejemplo el miedo
El miedo, como sabes, es uno de los sentimientos más infames que tenemos como seres humanos. Es uno de los mayores (si no el mayor) impedimentos para nuestro éxito. Sin embargo, a pesar de la percepción negativa que podemos tener del miedo, también tiene su pequeño lado bueno. El miedo evita que nos hagamos daño, tanto física como emocionalmente. El pequeño miedo inherente a nosotros es en realidad bueno para nosotros. Necesitamos esa pequeña cantidad de miedo. Evita que nos volvamos demasiado agresivos.
Lo mismo ocurre con el pánico. Un poco de pánico puede servir como forma de defensa. Pero estar envuelto en un pánico excesivo puede impedirte realizar tus actividades normales y puede disuadirte de actuar, especialmente en actividades no tan comunes.
Sin embargo, si sólo tienes una opción para enfrentarte a un ataque de pánico, te guste o no, tienes que encontrar el enfoque adecuado para contener dicho ataque y suprimir esta sensación tan incómoda.
Los ataques de pánico son en realidad un producto de la mente, una imaginación de una amenaza o peligro percibido que puede ser controlado. En realidad, ese peligro no existe. Incluso el peor escenario que se puede percibir en estas circunstancias no pone en peligro la vida.